NO, ¡¡¡DEMASIADA CARNE NO ES MALA PARA LOS RIÑONES DEL GATO!!!
Muchos propietarios siguen aterrorizados por la «sobrecarga proteínica» que sufriría su gato si comiera demasiada carne o pescado. Pero esto no tiene sentido, ya que estamos hablando de un carnívoro estricto.
EL GATO ES CARNÍVORO… Y SE NOTA.
El gato es la mascota carnívora por excelencia. De hecho, es un carnívoro obligatorio: su dieta debe basarse en carne y productos animales para satisfacer todas sus necesidades esenciales.
Desde el punto de vista anatómico, esta predisposición se manifiesta por la presencia de dientes pequeñosexcepto los caninos, que son largos y afilados para arrebatar la presaEl estómago del gato es pequeño y de poca capacidad; en la naturaleza se alimenta de pequeñas presas muchas veces al día, descansando entre comidas durante la digestión. El tracto digestivo del gato también es capaz de digerir y absorber proteínas y nutrientes de origen animal.
LA IMPORTANCIA DE LAS PROTEÍNAS PARA EL GATO
Las proteínas son nutrientes esenciales que permiten al organismo desarrollar correctamente los tejidos y enzimas necesarios para el buen funcionamiento de los procesos metabólicos. Es muy importante que estas sustancias se introduzcan en la dieta desde el nacimiento y después a lo largo de todas las etapas de la vida del gato, incluidos los adultos y los ancianos. Su carencia, o una ingesta inadecuada, podría causar incluso graves alteraciones en los distintos sistemas, desde la piel y el pelaje hasta auténticos trastornos metabólicos.
Sin embargo, muchos propietarios prefieren ahora los alimentos comerciales especialmente formulados para gatos domésticos, pero que sólo satisfacen parcialmente las necesidades nutricionales de «segunda naturaleza» de los gatos modernos: los piensos secos, aunque completos y equilibrados, también aportan carbohidratos innecesarios para el gato si se eligen como alimento exclusivo.
PROTEÍNAS SÍ, PERO MEJOR SI SON DE CALIDAD
El gato debe recibir una dieta adecuada para garantizar su salud y bienestar, y Las proteínas de alto valor biológico son la base de su pirámide alimentaria. Por supuesto, las cantidades de estas fuentes de proteínas deben calibrarse en función de la edad, el peso, la actividad y el estilo de vida de cada gato, pero podemos afirmar que complementar su alimentación secacompleta y equilibrada, con un alimento húmedo a base de proteínas de alta calidad es sin duda una opción adecuada a sus necesidades.
Por supuesto, estamos hablando de gatos sanos, capaces de digerir y procesar todas las fuentes animales. Si el gato padece una enfermedad, es muy importante seguir las directrices del médico veterinario para gestionar su dieta de forma que beneficie a la enfermedad y al tratamiento concomitante.
A lo que debemos prestar atención en una dieta mixta es al equilibrio de micro y micronutrientes (como los minerales), apoyándonos en el veterinario nutricionista y en el aporte de las necesidades calóricas adecuadas, para evitar excesos que puedan desarrollar sobrepeso y problemas metabólicos posteriores. Una ventaja adicional de la dieta mixta es la variedad proteica, que favorece así la introducción de las diferentes cadenas de aminoácidos de las que se componen las proteínas.
SÍ, ¿PERO RIÑONES DE GATO?
¿Y la salud renal? La leyenda urbana más famosa es que el «exceso de proteínas» provoca una disminución de la función renal en los gatos, lo que conduce al desarrollo de una insuficiencia renal crónica. Sin embargo, se ha demostrado que este problema, especialmente en el gato anciano, está más relacionado con una falta de hidratación y una dieta desequilibrada, que muy a menudo consiste únicamente en comida seca, inadecuada para la naturaleza alimentaria del gato.
Dra. Alessandra Calini
Veterinaria experta en nutrición