Tener un perro en nuestra vida ya es maravilloso, pero ¿qué debemos hacer si decidimos darle la bienvenida a otro amigo peludo a nuestra casa?

¿Cómo te preparas para darle la bienvenida? Y sobre todo, ¿cómo gestionar el primer encuentro entre nuestro perro y el recién llegado?

Preparación de la casa

Lo primero en lo que pensar es definitivamente preparar la casa para recibir al recién llegado y comprar todos los elementos necesarios como:

Cuencos nuevos : son importantes porque ayudan al recién llegado a identificar un lugar específico para comer y posiblemente, al menos inicialmente, lejos de donde el perro ya presente come habitualmente, de esta forma podrá tener un espacio en la casa que es su único;

Una perrera propia: es común que el perro ya presente no quiera compartir su perrera. También es bueno identificar un lugar apartado y tranquilo para la perrera del recién llegado donde pueda enseñarle al recién llegado dónde descansar y refugiarse.

Juegos nuevos: son importantes porque si usamos los juguetes del otro perro, oliendo un olor diferente al suyo, es posible que ya no los juegue, por lo que es preferible que cada perro tenga sus propios juguetes.

¿Qué segundo perro?

¿Es mejor elegir un perro del mismo sexo que el que ya vive con nosotros o mejor uno del sexo opuesto? Generalmente, para evitar complicaciones, es mejor si el segundo perro es del sexo opuesto.

Las hembras son generalmente más fáciles de convivir, pero también pueden surgir tensiones entre ellas cuando una de ellas entra en celo.

¿Cómo presentar a los dos perros? Los consejos

El primer planteamiento: es bueno que el primer encuentro se desarrolle en un lugar neutro y amplio donde los perros tengan la oportunidad de moverse y comunicarse libremente, como un jardín o un parque. Esto les facilitará el regreso a casa después de que se hayan conocido con calma.

Manejo de la atención: un aspecto muy importante es no prestar mucha más atención al recién llegado, porque el otro perro podría ponerse celoso y ver al nuevo perro como una amenaza, por lo que nunca debemos hacer pensar al primer perro que el recién llegado está ahí. su lugar.

Si no se llevan bien, no siempre es fácil. Después de mil precauciones y pruebas, es posible que los perros no se lleven bien, puede pasar. Con mucha paciencia y calma, por primera vez, puedes manejar a los perros de la casa manteniéndolos separados ayudándote con las puertas especiales. Si la situación no mejora, es útil ponerse en contacto con expertos en educación canina o pedir consejo a su veterinario.

Dar la bienvenida a un nuevo perro en casa siempre es una gran alegría: con un poco de paciencia y un poco de previsión, ¡los dos perros seguramente se convertirán en mejores amigos en las aventuras!