Los cachorros pasan por distintas fases de crecimiento en los primeros meses de vida, cada una de las cuales tiene unas necesidades nutricionales específicas:

FASES DE CRECIMIENTO DEL PERRO

Infantil. Los cachorros nacen sin capacidad para ver, oír o regular la temperatura corporal. Dependen totalmente de su madre para alimentarse y cuidarse. Durante los primeros días de vida, los cachorros se adhieren a las glándulas mamarias de su madre para obtener leche. La leche materna es rica en nutrientes esenciales y, en las primeras horas gracias al calostro, en anticuerpos importantes que ayudan a proteger a los cachorros de enfermedades comunes. Por tanto, es comprensible que la alimentación de la madre desempeñe un papel esencial en esta etapa, no sólo para su propio bienestar, sino también para el de los cachorros y su crecimiento correcto y robusto. Se recomienda alimentarlo con un buen pienso para “cachorros”, ya que es más rico en energía y nutrientes esenciales como proteínas y grasas, y acompañarlo siempre de abundante agua fresca.

Destete. Alrededor de las 4-6 semanas de edad, los cachorros empiezan a mostrar interés por alimentos más sólidos y puede iniciarse el proceso de destete. Además de la leche materna, es posible ofrecerles comidas colectivas, con alimentos sanos y equilibrados que se adapten a sus necesidades de crecimiento, además de ser digeribles, y que no descuiden el bienestar de la flora microbiana intestinal: de hecho, es en esta delicada fase cuando asistimos a la construcción de lo que será la microbiota del sujeto incluso cuando sea adulto, condicionando así también su bienestar o predisponiéndolo a alteraciones digestivas o dermatológicas. Empezando con mousses y cremas, a las 8 semanas de edad los cachorros empiezan a comer alimentos sólidos de forma más constante, eliminando por completo la leche materna, por lo que es importante proporcionarles una dieta equilibrada y completa.

Jóvenes. Entre los 2 y los 6 meses de edad, según la raza, los cachorros siguen creciendo muy rápidamente, aumentando también su masa en proporciones considerables cada semana. Durante esta fase, es esencial proporcionarles una dieta nutritiva que favorezca su crecimiento y desarrollo: rica en proteínas de alto valor biológico y capaz de aportar todos los nutrientes, como calcio y fósforo, en proporciones equilibradas para el crecimiento y la formación del sistema músculo esquelético, que deberá soportar y aguantar su peso y exuberancia sin sufrir daños. Por lo general, hacia el sexto mes de vida, algunas razas pequeñas pueden ralentizar su crecimiento y terminar gradualmente su desarrollo físico y fisiológico con la madurez sexual. En cambio, para otras razas medianas y grandes, el crecimiento puede durar hasta un año y medio, por lo que conviene prestar mucha atención a la alimentación del cachorro, pero también a su manejo en el entorno y durante las actividades.

¿QUÉ ES SIEMPRE IMPORTANTE EN UN CACHORRO?

Sin embargo, todas las fases necesitan un aporte equilibrado de proteínas, proporcionadas por fuentes de alto valor biológico, como las de origen animal, presentes en la carne o el pescado. Las proteínas son sumamente importantes en la nutrición de los cachorros, ya que les proporcionan los aminoácidos esenciales necesarios para el crecimiento y el desarrollo muscular, una piel y un pelo sanos, el buen funcionamiento del sistema inmunitario y mucho más. Durante las primeras etapas de la vida de un cachorro, cuando crece rápidamente, es especialmente importante asegurarse de que recibe una cantidad suficiente de proteínas de alta calidad. Idealmente, una dieta para cachorros debe contener un porcentaje adecuado de proteínas para cachorros, generalmente en torno al 22-32% de la materia seca del alimento total. Es importante elegir alimentos especialmente formulados para cachorros, ya que estarán equilibrados para satisfacer sus necesidades específicas de crecimiento y desarrollo, leyendo atentamente las etiquetas con la lista de ingredientes utilizados.

Dra. Alessandra Calini

Nutricionista veterinario